Por lo general, existe un interés y un deseo genuinos de invertir, pero entre las razones por las que crees que no puedes (o no quieres) se encuentra el miedo que implicaría invertir en bienes raíces que representa poner una cantidad alta o todo el patrimonio de tu vida, pero te abrirán un mundo de posibilidades.
El miedo a lo desconocido es el factor decisivo. Pero con la cantidad de apoyo y los incentivos financieros que están disponibles para los inversores de hoy, la inversión inmobiliaria nunca ha sido más fácil de realizar que ahora.
1. Falta de conocimiento del mercado
La falta de conocimiento sobre el mercado inmobiliario se suele citar como una de las razones por las que la gente no invierte. La mayoría de la gente piensa que es necesario tener conocimientos internos sobre el mercado inmobiliario local para poder comprar la propiedad adecuada al precio adecuado.
Como todo lo nuevo, da tanto miedo como curiosidad y ahí está una de las claves, ya que todas las personas en algún momento serán novatas en algo, pero acercándose con la gente adecuada y con personas expertas en el tema.
Más que saltar solo al abismo, estarás recortando la curva de aprendizaje que tanto miedo da, por lo que el conocimiento y experiencia que adquieras, de la mano de un experto reducirá tu miedo a invertir en bienes raíces.
2. “No tengo experiencia para tomar buenas decisiones”
Suena fácil, pero solo lo lograrás haciéndolo. Existen muchas creencias limitantes que no te permiten dar el gran paso, y el conocimiento es como bocados que alimentarán tu confianza, y aunque suene “obvio” solo tienes que seguir adelante.
A pesar del dinero extra que puedes generar, a veces sabes que tienes el potencial para llegar más lejos. , porque nos han dicho y repetido: trabaja duro, gana dinero decente, pero si necesitas tiempo para aprender, jugar al golf o dedicarse a otra cosa. . .
Más que trabajar duro, hay que trabajar de manera inteligente.
3. “No tengo tiempo”
Si no fuera una persona tan ocupada podría tener tiempo para aprender todo sobre inversiones inmobiliarias. Pero por ahora, no es posible.
Es curioso cómo cuando las cosas pasan de un ” debería ” (como en, ” debería hacer eso”) a un ” debe ” (como en, ” debo hacer esto ahora”), sólo entonces descubres cómo hacer realmente que las cosas sucedan.
4. “Voy a tomar una decisión horrible y perderé mucho dinero”.
Honestamente, esto es natural. Anhelamos la seguridad, especialmente cuando hay otras personas que confían en nosotros, como la familia. Después de todo, nunca queremos tomar una decisión que ponga en riesgo nuestro futuro financiero.
Estas preocupaciones completamente comprensibles pueden hacernos cuestionar nuestras decisiones. Qué pasa si fallo? ¿Qué pasa si elijo la inversión incorrecta y lo pierdo todo?
Sin embargo, no hacer nada es, a menudo, peor que intentarlo y fallar. Existe algo llamado “costo de la inacción” y, a menudo, no lo consideramos.
Claro, puedes intentar algo y podrías fallar. Pero el fracaso en este sentido no suele significar perderlo todo. Lo más probable es que estés en el mismo lugar en el que estás ahora, todavía agitándote.
Por otro lado, si te pones ahí afuera y todo va bien, entonces tienes la oportunidad de crear la vida que realmente deseas.
Entonces, con esa perspectiva, el costo de la inacción es peor que el costo de actuar y fracasar. Todos hemos cometido errores. Incluso el precio a veces de ser mentor es haberse equivocado, pero que tú no lo hagas.
5. La gente prefiere ver crecer su dinero en una cuenta de ahorros.
Es una sensación reconfortante ver crecer sus ahorros en una cuenta de ahorros. Por lo tanto, no es de extrañar que la gente no quiera arriesgarse a trasladar fondos al mercado inmobiliario, donde las ganancias son menos evidentes a corto plazo. Pero eso no significa que sea lo correcto.
¿Estás contento con el equilibrio y dónde te encuentras en tu vida? Si es así, es asombroso. Si no es así, ¿hay opciones que tomarías de manera diferente si el miedo no se interpusiera en su camino? ¿Deberías tomarse más en serio el miedo a la inacción?
En Ganadores tenemos el enorme compromiso de poner nuestro conocimiento a tu servicio para que puedas crecer. No todo lo que te dicen es verdad acerca de que puedes perder tu dinero. Un verdadero experto te dará la guía necesaria de lo que habrás de hacer para que inicies sin miedo tu negocio propio en bienes raíces.
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